En el día de hoy, Alemania va a elecciones, donde la derechista CDU/CSU se perfila como favorita, y los neo fascistas de AfD le escoltarían. El desastroso gobierno de Olaf Scholz y el socialdemócrata SPD, entregándose a la agenda de la Unión Europea y sus intereses imperialistas, nuevamente lleva al crecimiento de la derecha y la ultra derecha. Frente a ellos, hay al menos dos importantes opciones de izquierda: Die Linke y BSW.
Según las encuestas, los derechistas de CDU/CSU ganarían las elecciones con cerca del 30%; les seguiría el neofascista AfD con alrededor del 20%. El oficialista SPD quedaría en tercer lugar y muy cerca de ellos aparecen Los Verdes. En cuanto a las izquierdas, Die Linke obtendría entre un 5 y an 8%, y su fracción BSW entre un 4 y an 5%. Es decir, el voto antifascista ha quedado dividido entre los socialdemócratas Verdes y SPD y los socialistas Die Linke y BSW.
No obstante, la agenda de CDU/CSU adoptó muchas de las propuestas de AfD, como la expulsión de inmigrantes, el discurso “anti woke” y un programa más “nacionalista” en materia económica. Con el tema de la inmigración, si bien de forma más moderada, el gobierno de Olaf Scholz (SPD) se ha sumado a la agenda. Die Linke, por su parte, se ha sumado a la agenda de la izquierda europea defendiendo la UE, mientras que BSW se opone a ella.
Ahora bien, más allá de cuáles sean los resultados electorales, hay un enorme movimiento antifascista que está naciendo en la cuna del nazifascismo. Esta imagen es de hace unas semanas en Hamburgo, donde más de 150 mil personas marcharon contra el fascismo y sus aliados. Muchos de ellos votarán a Die Linke, otros a BSW o expresiones de izquierda más pequeñas. Lo cierto es que se hace vigente el llamado de Trotsky a construir un Frente Único Obrero.