Milei fue a Bahía Blanca, lo increparon vecinos y duró menos que Spreen en Riestra

Vecinos increparon a Milei en Bahía y el presidente se fue sin llevar ninguna ayuda humanitaria a la ciudad.

Javier Milei fue a Bahía Blanca recién seis días después del desastre que ya dejó al menos 16 fallecidos, casi cien personas desaparecidas y una destrucción calculada en $ 400.000 millones.

En este contexto, fue recibido con insultos por parte de los vecinos, que siguen esperando una respuesta integral del Estado y no las fotitos que se sacan Petri, Bullrich y ahora Milei y su hermana Karina.

El presidente hace la “visita” el mismo día en que Diputados debatirá un proyecto para declarar la emergencia en esa ciudad y luego de recibir críticas por parte de opositores y hasta de sus aliados.

Cabe mencionar que hace unos días, los ministros Petri y Bullrich, fueron expulsados por los vecinos luego de que, igual que el presidente, fueran a sacarse la fotito y fingir que estaban trabajando.

Y es que, tanto Milei como sus funcionarios, van a Bahía Blanca con las manos vacías, a decirle al pueblo bahiense que ellos sabrán cómo hacer para superar esta catástrofe.

Al pedido de los vecinos se le suma el del gobernador Axel Kicillof, que aseguró que con los $10 mil millones que envió el gobierno no alcanza. De hecho, la provincia ha desembolsado $273 mil millones a la ciudad de Bahía Blanca, es decir, 27 veces más que Nación. Es por ello que el gobierno bonaerense, como el bahiense, exige al presidente que envíe más fondos para reconstruir la ciudad.

 

Sus ganancias o nuestras vidas

El gobierno nacional ha demostrado una vez más que su rol no es otro que administrar los recursos del Estado para servir al capital privado nacional e internacional. No les interesan las demandas populares; su tarea es salvaguardar las ganancias de los millonarios, para que puedan seguir acumulando a costa de nuestros esfuerzos. En Bahía Blanca ya entendieron que a la gente solo la ayuda la gente, pero necesitamos multiplicar las fuerzas, politizar la bronca y la ira y consolidar un masivo paro general activo, con los dirigentes a la cabeza o con la cabeza de los dirigentes. Esto está ocurriendo en Grecia, Valencia, etc.

Ayer cayó el gobierno de Portugal, a menos de un año de mandato. El capitalismo está en su peor crisis, y los dueños del capital no quieren perder ni un poquito de sus ganancias. La clase obrera argentina tiene que seguir por la misma línea que la clase obrera internacional y luchar hasta que se vayan todos. Por las 16 víctimas de Bahía Blanca, por los más de 100 desaparecidos, por todos y cada uno de las y los trabajadores que sufrimos las agresiones de la patronal y los gobiernos patronales, tenemos un mensaje que darles: sus ganancias o nuestras vidas. Que se vayan todos, gobierno de los trabajadores y el poder a las asambleas vecinales.