Instalar izquierda radical III

Cada año vengo publicando esta serie de artículos llamados “Instalar izquierda radical”. Creo que cada numero es mas una actualización acorde a los tiempos que vivimos y a experiencias militantes. En la era del “anarco capitalismo” y un peronismo que da mas pena que gloria, creo que estamos llamados a construir una fuerza independiente de izquierda, con perspectiva socialista.

De ante mano, sinceramientos: en 2022 y en 2023 plantee también la necesidad de construir una izquierda radical, y la mayoría terminamos militando la campaña de Juan Grabois, que en aquella época se presentaba como una expresión radical dentro de Unión por la Patria. Esto le permitió a su partido, Patria Grande, consolidar una estructura politica bastante gruesa y firme, pero al sacrificio de abandonar (no en su totalidad) el viejo enfoque marxista que tenían. Hoy, de esa experiencia lo que queda es una suerte de peronismo radicalizado, un volver a la llamada “izquierda nacional”, que para mi fracaso en los 70´ por su incapacidad de poder plantear la toma del poder y la construcción del socialismo real. Pero esto no es solo algo característico del nacionalismo popular, la izquierda marxista tampoco lo ha podido lograr concretar, por mucho que el trotskismo haya crecido en nuestro país. 


Y desde la segunda tira de esta publicación, allá por 2023, creo que lo mas importante es poder identificar las herramientas que nos faltan. Creo, y puedo estar muy equivocado, que las ideas de izquierda radical se están instalando, y mas después que Garcia Linera nos tirada un centro a raíz del ascenso de Milei. El problema es que, los laterales tiran buenos centros, pero si los delanteros, mas precisamente los 9 de área, no definimos el gol, el partido lo seguimos perdiendo. Voy a volver a la expresión directa, sepan disculpar, pero, ¿Dónde esta en Partido Comunista, el Partido Comunista Revolucionario, el Frente Patria Grande, Unidad Popular? en Unión por la Patria, cuya mesa – si es que aun existe eso – esta conducida por el Partido Justicialista, presidido aun por el, además de hambreador, ajustador y neoliberal, denunciado por violencia de genero, es decir el impresentable de Alberto Fernandez. Entonces, ¿Qué hacemos?

Los debates hacia los partidos de izquierda

Así como critique a los partidos de izquierda de UxP, también me corresponde criticar a los partidos del Frente de Izquierda, por su constante negación – salvo MST – a llamar a la máxima unidad obrera. Pareciera ser que lo ideológico y el CV electoral son mas importantes que la lucha de clases. No puede el PTS, IS y el PO seguir poniendo la excusa de que algunos de nosotros hemos llamado a votar a Alberto Fernandez en 2019, y otros a Scioli en 2015, y por tal razón debemos ser excluidos directamente del FIT, salvo que individualmente demos un giro hacia la izquierda “anticapitalista” (léase trotskismo) y nos sumemos a un partido ya parte del frente.

Es cierto que  el trotskismo hegemoniza hoy la izquierda, pero no podemos pensar en izquierda en singular si no en plural. Yo, personalmente, vengo de una tradición Marxista-Leninista, ex militante de la Federación Juvenil Comunista, la juventud del Partido Comunista de la Argentina. Si bien en mi viraje considero que las tesis de Trotsky, e incluso algunos puntos de las tesis de Nahuel Moreno tienen sentido a la fecha, no adhiero ni al trotskismo ni a la Cuarta Internacional por su fracaso político para consolidar un proyecto comunista a nivel internacional. Creo que, en el caso del trotskismo no ha sido por falta de independencia de clase si no por cierto dogmatismo, al negarse a ver la pluralidad del movimiento comunista.

 

Aun así, creo que la Liga Internacional Socialista (LIS) es la única que ha avanzado en este debate al integrar fuerzas no precisamente trotskistas en su Internacional. Algo que, en un principio debió ser la Internacional en la que militaba cuando era militante del PC, es decir el EIPCO, pero que a la vista esta que no lo es ni lo será, e incluso técnicamente dicha internacional esta rota entre el bando del KKE y el bando del PCFR y PCChina. En este sentido, celebro algunos avances desde 2022 a la fecha, puesto que no solo considero que yo me he radicalizado, si no que hay procesos de radicalización en todos los espacios de la izquierda nacional e internacional.

 

En este sentido, quiero mencionar, como leninista, la importancia del antimperialismo en el ordenamiento de las fuerzas de izquierda. La causa Palestina ha escalado a nivel internacional, y los que militamos por el fin del genocidio nos importa mas bien poco las denuncias e incluso detenciones que el poder judicial burgués nos pueda imponer, la causa Palestina es un tren sin freno rumbo a la liberación, por que en el grito de “Palestina libre” hay un grito de “proletarios del mundo, unidad”, por que la bandera de Palestina, manchada de sangre es la bandera del proletariado internacional frente a los gobiernos nacionales que financian el genocidio con nuestros impuestos, con recursos de nuestros Estados-Naciones. Pero no es solo Palestina, si Boric se alía al bando ucraniano, poco importa que Boric gobierne junto al Partido Comunista, la izquierda también será un tren sin freno contra el, sin importar que sea un mal menor, y en este sentido no se salva ni Xi Jinping cuando abusa de la posiciones de poder que tiene China y realiza practicas imperialistas. Los proletarios del mundo dicen no a la guerra por que la guerra es un negocio imperialista y el imperialismo es la fase superior del capitalismo, decimos no a la guerra imperialista pensando en un futuro socialista.

Lo que queremos y lo que tenemos

A mis 27 años de edad ya pase toda decepción y enfrentamientos varios con mis ex dirigentes. No voy a comprar esa excusa estúpida del militante orgánico que eternamente va atrás de la burguesía, ese que te dice que la base del Leninismo es el Centralismo Democrático, y como tal, las discusiones se dan hacia dentro del Partido, no hacia afuera. Llegado a este punto, y habiendo Partidos que se dicen comunistas, creo que todos se han alejado del Marxismo-Leninismo, en ninguno funciona el Centralismo Democrático, y si alguno me convenciera de ello, a sus filas me afiliaría por que no soy dogmático, soy leninista. 

 

Ahora, dicho esto, hay que reconocer que no nos da la fuerza para construir un nuevo Partido, algunos preferimos construir un proyecto para construir el Partido. En este sentido, somos materialistas, sabemos lo que queremos pero sabemos lo que tenemos, y lo que tenemos es poco y con lo poco tenemos que construir. Por eso hablo de instalar la izquierda radical, pero considerando que hay un piso de instalación avanzado, ahora corresponden los debates para la construcción del Partido, que es la herramienta que tiene el proletariado para la necesaria toma del poder, para tomar el cielo por asalto.

 

Un ejemplo, en España los camaradas de la Juventudes Comunistas rompieron con el Partido Comunista de España, o mejor dicho, fueron expulsados por la mafia socialdemócrata de Enrique Santiago y Yolanda Diaz, y ante la imposibilidad de construir un nuevo partido se sumaron a la Coordinadora Juvenil Socialista. Eso es parte de la construcción de un proyecto, poder comprender cuando no nos da, y ceder ante proyectos mas formados y con una mayoría de puntos programáticos en común. Y si bien no voy a hablar acá de mis debates personales con militantes de partidos a los que, al menos yo he llegado a coincidir en muchos puntos, si  considero que es importante comprender que en un proceso de reorganizarnos, el tiempo no será el mejor amigo que tengamos: mientras las embestidas del gobierno del hambre avanzan a la velocidad de la luz, nuestra reorganización como comunista avanza muy lentamente y eso es un problema, pero no debería ser una razón para la desesperación. 

 

Y en esto de hacer lo que se puede con lo que se tiene, tenemos que saber nuestro lugar en la construcción de un proyecto político. Es cierto algo que dicen los comentaristas, a mi no me da la nafta para siquiera conducir un Centro de estudiantes. No soy buen orador, mucho menos estratega, no tengo cualidades de lo que con mis amigos consideramos “flaco politica”, mas bien soy un “gordo politica”, es decir ese que, de forma bruta y casi desde el sentido en común busca instalar ideas y agitarla. Es importante comprender esto para, en primera instancia construir un proyecto con camaradas de todos los perfiles, es decir: flaco politica, gordo politica, flaco gestión, gordo gestión, y los nuevos conceptos que inventamos con mis amigos y probablemente no estén entendiendo (ya lo entenderán).

 

Efectivamente si, mi rol es ser un propagandista, un agitador, un gordo politica. Nunca seré ni concejal, no es mi lugar, lo hare mal sin importar del equipo de trabajo que tenga detrás. No solo eso, sacando la comunicación, no podria ocupar mayores espacios en un hipotético Comité Central. ¿Por que menciono esto? es muy importante, Roberto Vaquero por ejemplo, es un gran propagandista de la ideología mas extremista del comunismo, la que no comparto pero no niego que forme parte del movimiento, vamos que hablo del “antirevisionismo”. Sin embargo, la ha jugado de intelectual organico primero, escribiendo libros y dando talles de formacion, y a la legua se ha notado sus incongruencias, no le da la nafta por que su lectura es limitada al Marxismo-Leninismo-Hoxhaismo; pero peor aun cuando comenzó a jugarla de dirigente político, con la misma capacidad discursiva que Santiago Cuneo en Argentina. No nos sirve, el militante todo terreno despareció, o mejor dicho, es una pieza difícil de conseguir. Pero lo que si tiene Vaquero, como Armesilla, o los raperos comunistas de España o los influencers comunistas de Argentina, es la capacidad de instalar culturalmente un movimiento.

 

Un intelectual es Garcia Linera, un académico que estudio en profundidad el marxismo y no se limito a lo teórico si no que llevo sus estudios al analisis de campo, practicando primero la guerra de guerrillas y luego la participación politica mediante el sistema electoral boliviano, para finalmente formar parte de un gobierno y transformar la sociedad boliviana. Pero a diferencia de Evo Morales, Linera jamás podría ser presidente, lo dijo el, su objetivo no es ese si no formar millones de nuevos comunistas. Linera es un intelectual que lleva al extremo la teoría y el estudio constante de la sociedad mediante la metodología marxista. Se puede decir que es del perfil de Gramsci o Matiategui, que si bien no llegaron a gobernar, fundaron partido marxistas al mismo tiempo que estudiaban y profundizaban el marxismo adaptándolo a las condiciones materiales de existencia. Nosotros no somos eso, somos agitadores, sabemos lo básico del Marxismo-Leninismo, pero nuestro rol es instalar, agitar, volver a instalar, hacer el trabajo sucio.

 

Queremos el Partido de cuadros con alcances a la masas del que hablaba Lenin, pero no lo tenemos. Queremos ser intelectuales orgánicos, pero solo somos agitadores (otro tipo de cuadros). Nos formamos un poco y queremos ser dirigentes, pero no logramos poder aplicar la teoría en la praxis, no logramos ser estrategas y terminamos fundiendo los partidos. Ese es el problema eterno de la izquierda Argentina, pero hay que construir con lo que tenemos, no con lo que queremos, por que el queremos es el horizonte, el horizonte es eso que nos hará formarnos, organizarnos y seguir firme por la senda comunista, por que queremos alcanzarlo, es una necesidad.

El problema con las contradicciones

Recupero dos cosas que ya dije, por un lado que el Partido es sumamente importante como herramienta para la construcción politica, y por otro lado, que yo no soy ni intelectual orgánico, ni militante de un Partido, por ende todo lo que diga esta sujeto a criticas y consideraciones de quienes si tienen estos perfiles. Dicho esto, y a consideración propia y de muchos camaradas con los que hablo, el principal problema para adentrarse en un Partido son las contradicciones con las que hay que asumir. Me explico, puntos en común con el Partido Comunista, otros con el Partido Comunista Revolucionario, hay de sobra, pero la contradicción principal, en las dialécticas de las contradicciones, es su constante seguidismo al peronismo, lo que no solo nos haría militar en contra de nuestro horizonte, que es superar al peronismo con una alternativa de izquierda, si no también nos insivilizaria como militantes comunistas puesto que en el sentido en común, y al mezclar las banderas en un amplio frente peronista, nos llevaría a que se nos vea como peronista.

 

El PC y el PCR deberían romper con el PJ y no hay ni un debate mas que dar sobre dicha contradicción, pero vamos a la segunda contradicción, la burocratización de estos partidos. Es decir, en la mayoría no esta funcionando el centralismo democrático, por lo que toda invitación de sus militantes de base a sumarnos a sus filas y discutir los puntos programáticos del Partido se diluyen en el aire en la praxis. El PC tuvo su Congreso en 2016, yo me sume en 2017 a La Fede, y recién ahora en 2024, es decir 4 años después – o 3 si tenemos en cuenta que en 2020 hubo una pandemia – de la fecha en la que deberían haber organizado el Congreso. Estamos hablando de que durante 8 años no hubo una instancia de debate, se siguió sosteniendo las mismas tesis durante dos gobiernos de diferentes posiciones políticas (Macri y Fernandez), y hasta tres si tomamos en cuenta que cuando se realice el 28 Congreso, Milei rondaría casi el año de su mandato. Y mas allá de que se sabe que el PC seguirá usando la tesis del Frente de Liberación para justificar el seguidismo al Partido Justicialista, no hay partido que resista con tanta falta de Centralismo Democrático, y es normal que de mi generación queden muy pocos hoy militando orgánicamente allí. Esta segunda contradicción, es peor que la primera.

 

En una tercera contradicción esta la trayectoria histórica. Yo soy uno de los que se considera “de linea FJC-PC”, de raíz en La Fede, y honestamente me costaría militar en un partido de otra “tradición”, seria algo así como romper las raíces de donde uno proviene. La mayoría de los partidos, incluso los de tendencias, vienen de una “tradición politica”, y esto agranda las contradicciones hacia la construcción de un proyecto unificado. Quizás, esta es la mas infantil y necesariamente superable de las contradicciones, puesto que no es necesario vivir del pasado, hay que pensar siempre con una perspectiva progresista (palabra deformada) de la historia. De hecho, es quizás la contradicción principal que resuelve a las contradicciones secundarias: las de militar un partido con programa sin independencia de clase y/o en tendencia a la burocracia.

Instalar, fracasar, volver a instalar, la izquierda radical

A raíz de los hechos con Alberto Fernandez y la denuncia por violencia de genero que presento su ex mujer, hubo comentarios varios: desde compañeros con los que militamos la victoria del Frente de Todos en 2019 hasta quienes nunca compraron con la estrategia del mal menor. Hay un punto en común, todos sabíamos lo que era Alberto Fernandez, como todos sabíamos lo que era Scioli en 2015 y Massa en 2023; es mas, y para la polémica con mis amigos, todos sabíamos que Grabois por mucha historia que haya hecho con las primeras internas en el peronismo desde 1989, y encima la primera candidatura de una corriente filo peronista de izquierda, en el fondo no fue otra cosa que lo que el trotskismo advirtio, es decir una contenedora de votos por izquierda al candidato de la embajada y de la administración Biden, a Sergio Tomas Massa y su programa entreguista y pro imperialista. Y de eso, no solo Grabois y su sector, muchos de nosotros fuimos parte, y algunos – me incluyo – después de habernos ido del Frente de Todos en 2021 tras el acuerdo de Guzman con el FMI.

 

Estas líneas son mucho mas crudas que las de 2022 y 2023 de esta seguidilla de artículos, y quizás tenga que ver con un proceso acumulativo de derrotas. Scioli, Alberto, Massa, y cuantos mas? Esta claro que ha llegado el momento de cambiar la estrategia politica.  Mientras el “campo popular”, con jingles y cara bonitas buscan instalar que la salida es Kicillof 2027; mientras Grabois se lanza como candidato a diputado en 2025; mientras otros se van con Moreno, la clase obrera sufre el peor ajuste y saqueo desde la vuelta a la democracia. Que le vayan a decir a los millones de obreros que perdieron su trabajo si les importan los candidatos del reordenamiento peronista para 2025 y 2027; que le pregunten a lxs compañerxs judicializados y/o detenidos por luchar contra el hambre si van a esperar a votar por Kicillof como salida. Si son los mismos que dejaron a la compañera Milagro Sala pudrirse en la cárcel, si son los mismos que pasaron topadoras a familias obreras para que un burgués terrateniente construya canchas de golf – spoiler, ni las ha hecho. Son los mismos de la Ley Antiterrorista; el Proyecto X; la perpetua a Petroleros de las Heras; los de la megaminería contaminante que envenenaba familias con cianuro al servicio del capital de Barrick Gold; los que masacraron al pueblo Qom y detuvieron mujeres mapuches. Es que, cuando se trata de defender los intereses de la burguesía, las practicas son las mismas, y por mucho que nos vendan que la burguesía nacional es progresista, ya lo dijo Marx, la burguesía es la misma en todos lados, es internacionalista, tanto o mas que nuestra clase.

 

Si, fracasamos, quisimos instalar la izquierda radical y no pudimos, nos comimos esa del mal menor, ponele. Pero, al menos en nuestra comunidad, son nuestros propios seguidores los que nos corren por izquierda cuando nos sale una de tibios. Y en ese sentido creemos que algo logramos instalar, un piso, por mas pequeño que sea, hemos generado. Y es que, al fin y al cabo los procesos de instalación son eso: acumular fuerza, debatir, equivocarse, debatir, corregir y ajustar algunas líneas, y volver a acumular fuerza. No existen recetas mágicas, no hay formulas exitosas, el proyecto comunista esta en constante formación y actualización, y por eso mencionaba mas arriba la importancia del Centralismo Democrático. Y que esto no se entienda solo como una critica a los partidos de izquierda de la Argentina, incluso la lamentable disolución de la URSS proviene de este proceso que comenzó cuando Stalin y su gente burocratizaron todo el PCUS, purgaron del partido a las expresiones criticas y generaron un proceso acumulativo regresivo, donde se termino consumando la derrota del proyecto socialista que comenzó mucho antes de 1917 y la toma del Palacio de Invierno.

 

Acá la clave siguen siendo las ideas, el horizonte. Por que uno se puede equivocar, y con el diario del lunes todos somos Lenin, pero si no aprendemos de las experiencias que fracasaron, volveremos a repetir los hechos. En palabras del camarada Leon Trotsky: “Quien se arrodilla ante el hecho consumado es incapaz de enfrentar el porvenir”. Por eso acá seguimos, con independencia de clases, y en nuestro rol de agitadores, buscando instalar una izquierda radical, que pueda construir un Frente Único de lucha y organización obrera, como así también un programa de transición al socialismo. Hay que volver urgentemente a las bases, y entonces hacernos estas preguntas, que al menos yo me las hago bastante a menudo:

 

* ¿Somos realmente marxistas? Si la respuesta es si, hay que pensar en que parte el marxismo plantea la alianza burguesía nacional-proletariado, por que esta tesis vienen de un contexto de guerra mundial, son las famosas tesis del Frente Popular. El marxismo tradicionalmente aboga por la lucha de clases y la dictadura del proletariado. Las concepciones socialdemócratas de la 2da Internacional fueron abandonadas por la 3era Internacional, la liquidación de esta por el estalinismo significo la separación entre el etapismo propio de los estalinistas y la revolución permanente , propia de los trotskistas. Hay realmente que ver cual de las estrategias sigue un enfoque marxista y cual no, pero entendiendo el momento histórico en el que nos encontramos.

 

* ¿Queremos realmente instalar un proyecto comunista? La cuestión es que, ser comunista es muy complejo en esta sociedad marcada por lo que Mark Fisher llama “el realismo capitalista”. Es mas fácil imaginar el fin del mundo que el fin del capitalismo, es mas rentable en nuestro país decirse peronista aunque en el fondo se reivindique desde Fidel Castro hasta Mao Zedong antes que levantar a mucha honra la gloriosa bandera roja del proletariado, acompañada de la hoz y el martillo. Siempre dije que no me gusta mucho Silvio Rodriguez por que como punki no me gustan los hippies, pero si algo me encanta de Silvio es su tema mas popular, el mas citado, el que todos cantan: nosotros somos necios como el Che, como Fidel, como Camilo, como Lenin, como Mao, como Ho; nos dicen no se puede y nosotros les decimos “si se puede”, nos dicen “sos argentino, tenes que ser peronista” y muy provocativamente decimos que nos honra ser comunistas, levantar las banderas del movimiento mas importante de los últimos siglos, el que libero al mundo del imperialismo nazi-fascista. Efectivamente, queremos instalar un proyecto comunista, no lo ocultamos, somos definidamente comunista y moriremos comunistas.

 

* ¿Qué tipo de Partido queremos? Esto me lo pregunto muy a menudo, por que instalar el proyecto no nos sirve de nada sin el Partido, que es nuestra herramienta. A veces la sangre tira y, como aun conservo amistades en el PC, me dan ganas de volver allí por eso que dice aquella canción mexicana “puedo morir como nací, en las filas del Partido Comunista”. Tengo un sueño claro, recuperar el glorioso Partido fundado en enero de 1918; aquel que adhirió a la Revolución Soviética y construyo el Camino Argentino al Socialismo; el Partido de la Brigada Lincoln, el que lucho en Nicaragua y El Salvador, el Partido del Negrito Avellaneda y centenares de camaradas que dieron la vida por esa herramienta. Pero ese Partido ya tecnicamente no existe, los mismos que hicieron el viraje en 1986 – incluyendo a Echegaray aunque me duela – lo liquidaron en el Peronismo. El PC no es el único caso, y por eso algunos preferimos soltar y decir “este no es el partido que queremos”, el Partido que queremos debe disputar, debe organizar a la clase obrera con independencia de clase parar enfrentar al poder burgués, por que nacional o internacional, los intereses de la burguesía son los mismos: la explotacion del hombre por el hombre, la explotación de los recursos naturales, en pro de incrementar la acumulación privada. Queremos un Partido marxista con perspectiva socialista, un Partido que luche para instalar el comunismo en Argentina.

 

* ¿Es posible una revolución socialista en Argentina? Si seguimos creyendo que no es posible, bajemosnos de la causa socialista; si creemos que la revolución se hace, vamos por un pésimo camino. Lo dijo Lenin, la revolución no se hace, se organiza, la revolución es un proceso, no un hecho lineal. Revolución es sentido del momento histórico, es cambiarlo todo, es destruir lo tradicional, es construir lo nuevo. A mucha honra de ser profundamente argentino y amar a mi país, no me representa esta bandera, ni la reforma que le hicieron al himno nacional; muchos menos me representa la tradición burguesa con la que se construyo este país tras la traición a los revolucionarios de mayo, y eso es lo que también queremos cambiar. Seremos considerados “apatridas”, pero en realidad nuestra patria no es la misma patria que la de ello, nuestra patria es la clandestina, la no oficial, la patria socialista, y la de ellos es la patria contratista. Y por ende, si, creemos que es posible una revolución socialista en Argentina, por que como revolución es un proceso y es sentido del momento histórico, ahora que están dadas las condiciones materiales para radicalizar la izquierda y el movimiento obrero, no pensamos que ceder sea una opción, creemos que hay que ir sin frenos en la lucha de clases hasta tomar el poder por asalto.

 

* ¿Cuánto estamos dispuesto a dejar por esto? Algunos estamos condenados, yo jure morir antes que dejar de luchar por la patria socialista, no solo por tener un familiar desparecido que lucho por ella, si no por que me inspiran las madres y niños palestinos dispuestos a morir antes que entregar su territorio; me inspiran Pablo Hasel pudriéndose en una cárcel por ser comunista; me inspiran Kirov y Martin, quienes me acercaron al marxismo y hoy ya no están entre nosotros; pero mas me inspira mi vieja, que no se considera comunista pero que hasta que sus huesos no den mas va seguir luchando por un futuro digno para nuestra familia. No se trata para mi de un “cuanto estamos dispuestos a dejar” por que no tenemos nada que dejar, no tenemos nada que perder y como no tenemos nada que perder, tenemos un mundo entero por ganar. Es el odio de clase, y eso es una esencia del proletariado, por que son ellos o nosotros, y como somos radicalmente de izquierda, queremos verlos arder, queremos que paguen todo el daño que nos han hecho, queremos la justicia social que es la abolición de las clases sociales y la socialización de los medios de producción.

Propagandistas, no-intelectuales, incorrectos: agitadores

Obvio que un intelectual ahora mismo me lee y lo primero que piensa es en lo tremendamente básico y errado de mis editoriales. Se lo he dicho muchas veces ya, no soy un intelectual, si se quiere soy lo que me han dicho ya varias veces, un “iletrado” e “ignorante” que solo sabe hacer buenas graficas y reivindicaciones de la cultura bolchevique. Amigos, eso es justamente a lo que me dedico, y ese es mi aporte a la instalación, pero Agitación es mucho mas que lo iletrado y no-intelectual que yo soy, es una herramienta para que quienes sepan realmente de teoría, para quienes si sean intelectuales orgánicos, puedan dar el debate y salgamos de una vez del sillón marxista. Por que si un “iletrado” como yo y mis camaradas tenemos publico es por que estamos dispuestos a debatir con todos, sin importar las tendencias marxistas y los agravios que recibamos. Quizás, los que tanto alardean del comunistometro tengan que aprender algo de los iletrados comunistas, que por que justamente no sabemos, debatimos, preguntamos y nos formamos constantemente.

 

Otras preguntas que me hago siempre es “¿como llegue al comunismo?”, por raperos como Pablo Hasel (libertad para el), Arma X, Dia Sexto, Portavoz, Chikos del Maiz, entre otros, y grupos de lo que se conoce como “rock proletario”, un subgénero del Oi!, hxc y punk con letras abiertamente comunistas, es decir Núcleo Terco, Monstruitos, RPG-7, Brigadas Flores Magon, Banda Bassotti, entre otros. Claramente, todos unos iletrados y no-intelectuales, pero los mejores propagandistas del comunismo en mi época, es decir entre los 2010 y 2015. De hecho, mientras escribo estas líneas escucho a Ars Moris, seguro después suene Eina o Sons Of Aguirre y Scila, todos rojos, todos bolcheviques. Y eso, escuchar esas canciones que siguen la linea del “socialismo o barbarie” de Rosa Luxemburgo me hace volver a mis raíces, a no perder el rumbo, y ese rumbo también es esto, ser un jodido propagandista, un enfermo obsesionado con formar miles de nuevos comunistas, por eso me verán en las calles con un buzo impreso con el 1917.

 

Nosotros queremos mas intelectuales orgánicos, como queremos mas agitadores y propagandistas, como queremos dirigentes. Queremos el Partido de cuadros con alcances a la masas, a las masas criticas que no se conformen con absolutamente nada. Por eso entendemos que nadie sobra, que todos son necesarios, que no es iletrado alguien por no estar a la altura de grandes intelectuales orgánicos, y que existen perfiles entre los cuadros, por ello un intelectual jamás será un buen comunicador, o agitador o dirigente, y si lo es, estamos hablando de militante todo terreno, esos que son difícil de conseguir, a ellos hay que cuidarlos y formarlos en sentido mas critico posible. Yo, he llegado a la conclusión de que Luxemburgo es mi principal referente, puesto que es alguien que además de dar la vida por la causa proletaria y socialista, no dudo en criticar a la socialdemocracia e incluso a los bolcheviques; lamentablemente la historia fue injusta con ella y la propia socialdemocracia la asesino. Una intelectual orgánica maravillosa, una dirigente politica que interpelaba a las masas obreras, y por sobre todo la mejor de todas las agitadoras, por que murió en su ley, radicalizando la izquierda, instalando la izquierda radical.

 

Retomando esto de los cuadros y sus perfiles, y los cuadros todo terreno, yo pienso que mientras no existan los segundos, tenemos que apostar a hacer lo que mejor nos sale sin necesidad de querer ser algo que no somos. Y humildad, por que nadie es mejor que nadie, y siempre se aprenden cosas nuevas en los procesos revolucionarios. Esto también aplica a los Partidos, por que al fin de cuentas, estos son construidos por los cuadros y los militantes de base. Cuando nosotros criticamos las practicas dogmáticas, reformistas o burocráticas de los Partidos, no lo hacemos por que nos creamos los dueño de la verdad, si no por que desde afuera y como comunicadores podemos observar lo que muchas veces desde dentro no se puede observar por estar en la cotidiana de la orgánica. 

 

Entiéndase entonces que, sin agitadores no se puede instalar nada. La comunicación es la pieza fundamental de la instalación hoy a día, y puede que los grupos de rap y rock comunista que a mi me acercaron mediante lo cultural al marxismo sean tan “iletrados” y poco intelectuales como nosotros, pero son necesarios. Por eso, desde acá celebramos a todos los agitadores que van apareciendo, a todos los proyectos comunistas, a todos los tuiteros, tiktokers y demás influencers comunistas que emergen día a día, incluso a aquellos que nos suelen bardear y hasta problematizan que es necesario crear otro medio “como Agitación” para “quitarnos peso en la izquierda”. Por favor, háganlo, lo necesitamos, la hegemonía es lo peor que nos puede pasar, y si no miren La Izquierda Diario, otros de mis referentes de adolescente y una de las causas por las que hicimos Agitación, hoy están lejos de lo innovador y de su carácter critico, ya ni publicándole artículos a marxistas que no son del PTS como hacían en sus inicios. Si nos pasa eso, vamos por mal camino, si podemos tener siempre con quien problematizar, mucho mejor, y si llegamos algún día a creernos los mejores, bájennos del pony.

 

Y esto es lo ultimo, la radicalización como la instalación requieren constantemente de la renovación y lo innovador, y no es del todo literal eso del “viejo joven” del que hablaba Allende haciéndose autorreferencia. Es decir, en el sentido que lo dijo tiene razón, pero para que lo viejo sea joven necesita de lo joven, y para que lo joven tome forma y se instale, necesita de lo viejo. La agitación no puede envejecer, por que conforme se profundizan las contradicciones de clase, la radicalización se hace mayor, y como el capitalismo, cuando funciona en cierta medida es una escalera social ascendente, a medida que nos vamos haciendo viejos vamos mejorando un poco – muy poco – nuestras condiciones de vida y nos vamos radicalizando menos, pero ahí esta lo nuevo para decirnos que no nos olvidemos que tenemos que seguir instalando la radicalización del movimiento obrero. Y esto, al menos en mi forma de ver la realidad, es un proceso eterno. Digo, ¿ustedes creen que en el socialismo no vamos a tener que protestar y construir una oposición de izquierda? hasta que no desaparezca el Estado y las clases sociales, la lucha continua y la radicalización no cesara. Solo cuando llegamos al comunismo podremos decir que hemos vencido, pero probablemente no viviremos para ello, por que el tiempo no nos va dar.

 

Y esto, como el tiempo es criminalmente corto, dejemos la tibieza de lado, y apuntemosno a construir de una vez por todas un movimiento socialista para formar un Partido de tipo Comunista. Instalar la izquierda radical, ahora, requiere de ello.