Por 128 contra 114 votos, la Cámara de Diputados convirtió en ley la iniciativa con los cambios incluidos por el Senado impulsados por el Frente de Todos. Los contratos entre propietarios e inquilinos se mantendrán por tres años y tendrán una actualización semestral con el índice Casa Propia.
Con la sanción de este proyecto los contratos se mantienen en tres años -como estaba en la original Ley de Alquileres-, los cuales deberán ser estipulados “en valor único en moneda nacional y por períodos mensuales sobre el cual podrán realizarse ajustes con periodicidad a intervalos no inferiores a seis meses”.
También, el Senado modificó el mecanismo de actualización del precio de los alquileres y estableció que “los ajustes deberán efectuarse utilizando un coeficiente conformado por la menor variación que surja de comparar el promedio del 0,9 de la variación del coeficiente de variación salarial publicado por el Indec y la variación del Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER), publicado por el BCRA”.
En resumen la nueva Ley de Alquileres estipula que: los contratos serán por tres años, con actualizaciones cada seis meses según el índice de salarios y estará prohibido publicar alquileres en dólares.
La iniciativa se aprobó con los 128 votos que fueron aportados por el Frente de Todos, el Movimiento Popular Neuquino, dos de Identidad Bonaerense, dos socialistas, una de Córdoba Federal, uno de Juntos por Río Negro, dos del Frente de la Concordia y cuatro de izquierda.
En tanto que fue rechazada por 144 legisladores que responden a Juntos por el Cambio, los tres libertarios que responden a Javier Milei, uno de Juntos por Río Negro, una de Identidad Bonaerense y uno de Córdoba Federal.