La UAW y los fabricantes de automóviles retomarán las negociaciones mientras la huelga provoca desabastecimiento.
* por Ulises Ojeda
El Sindicato de Trabajadores del Automóvil (United Auto Workers) anunció su voluntad de reanudar las negociaciones, iniciada la primera huelga de la historia en simultáneo contra General Motors, Ford Motor, Chrysler, Stellantis.
La acción sindical más contundente en décadas paralizó la producción en tres plantas que fabrican el Ford Bronco, el Jeep Wrangler y el Chevrolet Colorado, entre otros modelos populares en Estados Unidos.
En la jornada del viernes los miembros del sindicato se concentraron y manifestaron en contra de la reestructuración salarial de dos niveles, que privaba a los trabajadores nuevos del salario y ventajas de sus compañeros con más antigüedad.
Los reclamos de los trabajadores
Denunciaron que la reestructuración salarial era injusta y favorecía más a los inversores que a los empleados. El presidente de la UAW, Shawn Fain, dijo: “No vamos a dañar la economía, Más bien, vamos a arruinar la economía de los millonarios”.
El sindicato reclama una mayor participación en los beneficios, reducción de la jornada laboral, restablecimiento de las pensiones con prestaciones definidas y un trabajo más seguro en la transición de los fabricantes de automóviles a los vehículos eléctricos.
Joe Biden, el Presidente de EE.UU. que busca la reelección el año que viene, instó a las empresas automovilísticas a tratar a los empleados de la misma manera que han recompensado a sus ejecutivos. “Las empresas han hecho propuestas importantes, pero creo que deberían hacer más para garantizar que el aumento de los beneficios empresariales se traduzca en mayores contratos”, declaró.